martes, 13 de mayo de 2008

Anne Chapman

Ayer fui a la conferencia de Anne Chapman, la antropóloga franco-americana que ha investigado desde los años 60 a los pueblos extintos de Tierra del Fuego, sobre el rapto de los Kaweskar en 1881 y de los Selknam en 1889.

Todo esto, en el Centro cultural Palacio de la Moneda.

Les resumo: En Punta Arenas, en la isla grande, fueron secuestrados por un cazador de focas, un grupo de 11 indígenas Kaweskar (o Alacalufes). Se dice que fue un secuestro porque ellos no tenían la mayor idea de lo que estaban haciendo. Lo más probable es que desde sus canoas, este cazador de focas alemán los haya subido a su barco.

El alemanote los llevó a Europa. Estuvieron en un "zoológico de aclimatación” en dónde estaban expuestos frente al público, igual que animales. Varios antropólogos estudiaron sus comportamientos y elaboraron una serie de hipótesis para explicar porqué estos indígenas eran inferiores a los demás seres humanos “evolucionados” como nosotros.

Las hipótesis eran de lo más absurdas –todas fueron rechazadas, sin llegar a consenso- y hablaban de que los indígenas debían ser inferiores por su capacidad craneana, por la longitud de sus extremidades, por la forma de utilizar las manos y por la falta de curiosidad…todas ideas absurdas y –por supuesto- erradas.

Lo más gracioso era que mientras sostenían una hipótesis, los medían y los analizaban, sacando resultados no sólo insuficientes sino que además, absolutamente opuestos a lo que pensaban. Sus brazos no eran más largos –y más parecidos a los monos- como ellos creían sino que, por el contrario, eran incluso más cortos que los del hombre moderno. Incluso el tema de la curiosidad fue cuestionado más tarde por uno de los antropólogos, ya que la curiosidad tiene relación con el interés, y eso es relativo. Lo más probable es que nada de lo que ellos estaban viviendo les llamaba la atención, no así las cosas que se sucedían en sus vidas cotidianas en el sur de Chile, que de seguro, eran fenómenos naturales.

Al final, para resumir, muchos de ellos murieron durante el viaje por Europa, por enfermedades desconocidas para ellos, como la peste.

La historia de los secuestros de los Selknam es aún más terrible, porque dadas las características de esta cultura –no eran canoeros, sino cazadores recolectores de tierra firme- cabe suponer que la captura tiene que haber sido precedida por escenas de violencia, en dónde ellos, con sus arcos y flechas, poco podían hacer para defenderse.

Todo lo demás es similar a la historia anterior. También fueron sometidos a exposición pública, sólo que en este caso, no fueron seguidos por antropólogos, por lo que no existen mayores detalles ni estudios sobre esta experiencia.

Anne Chapman es una mujer que ha dedicado gran parte de su vida al estudio antropológico de pueblos en México y Chile. Tiene historia de sobra como para que puedan investigar más sobre ella y lo que hace. La exposición llamada “Testigo del Fin de un Mundo: Anne Chapman y los pueblos extintos de Tierra del Fuego” está desde el 7 de mayo en el Centro Cultural Palacio La Moneda. ¡Vayan a verla!

domingo, 4 de mayo de 2008

Sí se puede!!!

Cátedra Unesco-UDP sobre medios de comunicación y participación ciudadana

“El Ciudadano” Bruno Sommer

De chaqueta de cuero y voz pausada, Bruno Sommer se presentó este martes 29 en la Facultad de Comunicación y Letras de la UDP, para hablar del éxito de su periódico “El Ciudadano” y de las nuevas posibilidades del periodismo en nuestro país.

Con un estilo directo e informal, Bruno Sommer, director del periódico “El Ciudadano” nos contó su historia. Nos habló del “periodismo propositivo” y de la evolución del periodismo en Chile y de paso, nos entregó las claves para triunfar con un medio propio e independiente en un país en donde la prensa está en manos de pocos.

“El Ciudadano”, periódico mensual que ya cuenta con un tiraje de 15 mil ejemplares, página web y cobertura de Arica a Punta Arenas, nace en la Unión como iniciativa del propio Sommer, destinada a romper con el cerco del duopolio de la prensa en Chile. “La idea era generar nuevas pautas a nivel local y hacer que las voces ciudadanas tuvieran un espacio en la prensa. Que la gente se manifestara y le tomara el peso a la comunicación como motor para la acción”, cuenta Sommer.

Con el paso del tiempo y el éxito obtenido en su ciudad natal, “El Ciudadano” se extendió a la provincia de Ranco y luego a la Región de los Ríos, para lograr, finalmente, llegar a todo el país y establecer una sede en la capital.

“Mi idea era abrir un espacio para una sociedad civil que no encuentra los medios para participar, que fue desarmada y desarticulada en la época de la dictadura y que hoy recién comienza a hablar del periodismo ciudadano”, señala Bruno Sommer, quién propone un nuevo “periodismo para la acción”, en donde la ciudadanía pueda llevar a cabo denuncias e investigaciones de interés real para la gente.

“El Ciudadano” hoy cuenta con un equipo interdisciplinario de periodistas y profesionales como sociólogos, antropólogos y publicistas. Para lograr el financiamiento, Sommer cuenta que “lo primero que hay que hacer para sacar un nuevo medio es asegurar la plata. Conseguir avisadores y buscar el financiamiento, cotizar e informarse de las posibilidades que hoy existen, sobre todo con las nuevas tecnologías”.

En efecto, Bruno Sommer y su equipo de trabajo lograron obtener personalidad jurídica como Centro Cultural “Ciudadanos en acción” una manera –según cuenta Sommer- de optar a concursos y mayor financiamiento.

“Sacar un medio no es difícil y ustedes, como estudiantes de periodismo, deberían pensar en nuevos proyectos y así no depender de líneas editoriales de medios ya establecidos que coartan nuestra libertad. Para esto, las tecnologías están a nuestro favor”, comentó Sommer.

El modelo a seguir

En el periódico de Bruno Sommer participan pocas personas. El director, dos editores, un productor y algunos periodistas free lance. El financiamiento, en sus inicios, fue posible gracias al avisaje local de pequeños comerciantes, y hoy funciona con canjes en radios, algunas marcas con fuerte desarrollo de RSE (responsabilidad social empresarial) y promoción directa.

Incluso están viendo la posibilidad de un sistema de suscripciones “leales” pues “aunque podemos cobrar más para cubrir los gastos de envío, la gente que nos conoce hace tiempo nos sigue leyendo y pagaría por suscribirse. Existe mucha lealtad”, cuenta Sommer. Las ganancias obtenidas por publicidad y ventas son destinadas en su mayoría a mejorar el periódico, su página web y los sueldos de sus trabajadores.

“Acá el editor, el director y el productor ganan lo mismo. No hay diferencias de sueldo y lo que ganamos tratamos de distribuirlo en nuestros periodistas, que ganan según la nota que se publica, su importancia y cantidad de información” cuenta el director.

Las reuniones de pauta del periódico son abiertas. Muchas veces asisten personas que tienen temas ciudadanos y que son invitadas a proponer nuevos planteamientos. Entre los temas tratados por “El Ciudadano” está la iniciativa ciudadana de ley -para lograr la ley de bases de participación ciudadana-, el cuidado del medio ambiente, los problemas de discriminación y todos los contenidos que sean de real importancia para la ciudadanía.

Además, este periódico ciudadano cuenta con una red de “medios amigos” los cuales forman la “Red de medios libertarios para los pueblos de Chile”. “Mapu Express”, “Aldea comunicaciones” y “El polémico” son parte de esta red que esta logrando romper con el cerco informativo que existe en el país.

Bruno Sommer cuenta que debido a esto, los grandes medios como El Mercurio hacen caso omiso de su existencia. “En El Mercurio iba a salir una nota sobre nosotros y por órdenes de “arriba” no pudo salir publicado. Eso demuestra el poco interés que existe de su parte y el miedo porque les quitemos terreno, aunque lo que nosotros queremos hacer no es ganarle a los medios tradicionales, sino que entregar una nueva opción”.

Una opción pluralista e independiente que sigue tomando fuerza con el paso del tiempo y que tiene a un periodista “anarco-ecológico y creacionista” -según las propias palabras de Sommer-, como líder de una nueva forma de periodismo, en donde todas las voces pueden ser escuchadas.


Les recomiendo a todos que lo compren o lo lean en:


http://www.elciudadano.cl/